Phil Hellmuth es conocido como uno de los jugadores de póker más exitosos de la historia, con 17 brazaletes de la Serie Mundial de Póker (WSOP) y una carrera llena de logros en el circuito profesional. Más allá de las mesas, Hellmuth también ha incursionado en los negocios, aprovechando su fama para conectar con empresarios e inversores. Sin embargo, una decisión suya en el mundo de las inversiones le costó una oportunidad millonaria que pudo haber cambiado su vida.
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Recientemente, Alan Keating, otro reconocido jugador de póker y empresario, reveló en una entrevista con Doug Polk que Hellmuth dejó pasar una inversión increíblemente rentable. Según Keating, un emprendedor le pidió ayuda para encontrar inversores para su compañía emergente. Keating, quien ya había invertido en el negocio, vio una gran oportunidad y decidió compartirla con Hellmuth, ofreciéndole un trato excepcional: Invertir solo $15,000 a cambio del 4% de la empresa.
Lo único que Hellmuth tenía que hacer era conectar al emprendedor con personas influyentes y, a cambio, recibiría una participación en la compañía. Sin embargo, tras presentar el proyecto a varios inversores, ninguno mostró interés, lo que hizo que Hellmuth dudara de la viabilidad del negocio. Finalmente, decidió no invertir, perdiendo la oportunidad de obtener una gran fortuna con una mínima inversión.
El tiempo le demostraría que había cometido un error. Un año después, Keating recibió una oferta millonaria por su participación en la empresa, que en ese momento había alcanzado un valor de $2 mil millones. Si Hellmuth hubiera aceptado la oferta original, su 4% habría valido aproximadamente $80 millones.
I don’t think I’d ever be able to recover from this@Mister_Keating tells a story of how @phil_hellmuth had an opportunity for a $15,000 investment that would now be worth $80,000,000 🤯 pic.twitter.com/WeCRThH0M6
— Doug Polk (Code Doug) (@DougPolkVids) March 26, 2025
Keating comentó que, al enterarse de lo que había perdido, Hellmuth se sintió frustrado durante varios días. La idea de haber dejado escapar una fortuna sin siquiera arriesgar una gran cantidad de dinero fue un golpe difícil de digerir. Aunque en las mesas de póker Hellmuth es un experto en detectar oportunidades, esta vez su instinto empresarial no estuvo de su lado.